Eucaristía en honor a nuestro Santo Patrono: San Francisco Javier

El 03 de diciembre de cada año es para los jesuitas un motivo de gozo y reflexión, puesto a que se recuerda al co-fundador de la Compañía de Jesús, y patrono de las misiones: San Francisco Javier. Quienes formamos parte de las instituciones educativas ignacianas hemos escuchado las hermosas historías de Ignacio y Javier, dos amigos en el Señor cuyo amor por el servicio los unió en la misión de evangelizar al mundo.

San Francisco Javier, hasta la actualidad, sigue siendo un ejemplo del espíritu de la juventud. Este joven ambicioso, acomodado, determinado y con la mira en todos los placeres del mundo, escucha el llamado de Dios a través de su gran compañero Ignacio de Loyola y decide dejarlo todo para llevar el mensaje del amor a quienes más lo necesitan. Es así como logra evangelizar gran parte de Asia, sin saber el idioma, sin hacer preguntas, solo con la convicción de que el gran Dios de la vida lo iba a llevar por donde el debía estar.

Cada 03 de diciembre, nuestra institución recuerda el caminar de Francisco Javier, y sentados en la mesa del señor, a través de la eucaristía reflexionamos sobre como su ejemplo de vida puede ser un ejemplo para nosotros. Un testimonio de fe y confianza en el amor de Dios, que nos permite inspirarnos y soñar con jóvenes que no tengan miedo a salir al mundo poniendo en sus obras este amor que tanto necesita nuestra sociedad de hoy.